DescripciónLa anemia ferropénica es uno de los trastornos hematológicos más comunes entre los niños.
- La anemia ferropénica se produce cuando las reservas corporales de hierro son demasiado bajas para mantener la producción normal de glóbulos rojos.
- El equilibrio del hierro en el cuerpo normalmente se regula cuidadosamente para asegurar que se absorbe suficiente hierro para compensar las pérdidas corporales de hierro.
- La carencia de hierro se define como una disminución del contenido total de hierro en el cuerpo.
- La anemia ferropénica se produce cuando la carencia de hierro es lo suficientemente grave como para disminuir la eritropoyesis y provocar el desarrollo de la anemia.
FisiopatologíaEl hierro es vital para todos los organismos vivos porque es esencial para múltiples procesos metabólicos, como el transporte de oxígeno, la síntesis de ADN y el transporte de electrones.
- El equilibrio del hierro en el cuerpo se regula cuidadosamente para garantizar que se absorba suficiente hierro para compensar las pérdidas corporales de hierro.
- Mientras que la pérdida corporal de hierro es cuantitativamente tan importante como la absorción en términos de mantener el equilibrio del hierro, es un proceso más pasivo que la absorción.
- En las personas sanas, la concentración corporal de hierro (aproximadamente 60 partes por millón [ppm]) está regulada cuidadosamente por las células absorbentes del intestino delgado proximal, que alteran la absorción de hierro para ajustarse a las pérdidas corporales de hierro.
- Los errores persistentes en el equilibrio del hierro conducen a la anemia ferropénica o a la hemosiderosis. Ambos son trastornos con consecuencias potencialmente adversas.
- La captación de hierro en el intestino delgado proximal se produce por 3 vías distintas ;, que son la vía del hemo y 2 vías distintas para el hierro férrico y ferroso.
- El hierro hemo no se quela y se precipita por numerosos constituyentes de la dieta que hacen que el hierro no hemo no sea absorbible, como los fitatos, fosfatos, tanatos, oxalatos y carbonatos.
- En Norteamérica y Europa, la carencia de hierro es más frecuente en las mujeres en edad fértil y como manifestación de una hemorragia.
- Dependiendo de los criterios utilizados para el diagnóstico de la carencia de hierro, aproximadamente el 4-8% de las mujeres premenopáusicas presentan una carencia de hierro.
- Un estudio de la base de datos nacional de atención primaria de Italia, Bélgica, Alemania y España determinó que las tasas de incidencia anual de la anemia ferropénica oscilaban entre 7,2 y 13,96 por cada 1. 000 personas-año.
- Se encontraron tasas más altas en mujeres, personas jóvenes y mayores, pacientes con enfermedades gastrointestinales, mujeres embarazadas y con antecedentes de menometrorragia, y usuarios de aspirina y/o antiácidos.
- Los lactantes que consumen leche de vaca tienen una mayor incidencia de carencia de hierro porque la leche bovina tiene una mayor concentración de calcio, que compite con el hierro para su absorción.
- Durante la edad fértil, una mujer adulta pierde una media de 2 mg de hierro al día y debe absorber una cantidad similar de hierro para mantener el equilibrio ;, ya que la mujer media come menos que el hombre medio, debe ser más del doble de eficiente en la absorción del hierro de la dieta para mantener el equilibrio y evitar desarrollar una anemia por deficiencia de hierro.
CausasLas causas de la anemia ferropénica pueden ser:
- Factores dietéticos. La carne proporciona una fuente de hierro hemo, que se ve menos afectada por los componentes de la dieta que disminuyen notablemente la biodisponibilidad que el hierro no hemo; la prevalencia de la anemia por deficiencia de hierro es baja en las zonas geográficas donde la carne es un componente importante de la dieta; en las zonas donde la carne es escasa, la deficiencia de hierro es común.
- Hemorragia. Las hemorragias por cualquier motivo producen una depleción de hierro; si se produce una pérdida de sangre suficiente, se produce una anemia ferropénica.
- Hemosiderinuria, hemoglobinuria y hemosiderosis pulmonar. La anemia ferropénica puede producirse por la pérdida de hierro corporal en la orina; si una muestra de orina recién obtenida aparece con sangre pero no contiene glóbulos rojos, sospeche de hemoglobinuria.
- Malabsorción de hierro. La aclorhidria prolongada puede producir deficiencia de hierro porque se requieren condiciones ácidas para liberar el hierro férrico de los alimentos; luego, puede ser quelado con mucinas y otras sustancias (por ejemplo, aminoácidos, azúcares, aminoácidos o amidas) para mantenerlo soluble y disponible para su absorción en el duodeno más alcalino.
- Anemia ferropénica refractaria al hierro (IRIDA). La anemia ferropénica refractaria al hierro (IRIDA) es un trastorno hereditario caracterizado por una anemia ferropénica que no suele responder a la administración de suplementos de hierro por vía oral y puede responder sólo parcialmente a la terapia de hierro parenteral.
Manifestaciones clínicasLos signos de la anemia ferropénica incluyen:
- Peso corporal inferior a la media. El niño con anemia ferropénica consume más calcio que otros nutrientes, lo que le hace tener un peso inferior a la media de su edad.
- Piel y mucosas pálidas. La hemoglobina de los glóbulos rojos da a la sangre su color rojo, por lo que los niveles bajos durante la deficiencia de hierro hacen que la sangre sea menos roja; por eso la piel y las membranas mucosas pueden perder su color saludable y rosado en las personas con deficiencia de hierro.
- Anorexia. Es frecuente la pérdida de apetito, siendo la leche su única fuente de alimentación.
- Retraso del crecimiento. Debido a la disminución del consumo de otras fuentes de alimentos, el crecimiento del niño se atrofia.
- Apatía. El niño que tiene menos hemoglobina en la sangre se vuelve apático y débil debido a la disminución del oxígeno que circula hacia el cerebro.
Evaluación y hallazgos diagnósticosAunque la historia y la exploración física pueden conducir al reconocimiento de la enfermedad y ayudar a establecer la etiología, la anemia ferropénica es principalmente un diagnóstico de laboratorio.
- Recuento sanguíneo completo. El hemograma documenta la gravedad de la anemia. En la anemia ferropénica crónica, los índices celulares muestran una eritropoyesis microcítica e hipocrómica, es decir, tanto el volumen corpuscular medio (VCM) como la concentración de hemoglobina corpuscular media (CHCM) tienen valores por debajo del rango normal para el laboratorio que realiza la prueba.
- Frotis periférico. El examen de los eritrocitos muestra glóbulos rojos microcíticos e hipocrómicos en la anemia ferropénica crónica; la microcitosis es evidente en el frotis mucho antes de que el VCM esté disminuido después de un evento que produzca deficiencia de hierro.
- Hierro sérico, capacidad total de fijación y ferritina sérica. Los niveles bajos de hierro y ferritina séricos con una TIBC elevada son diagnósticos de deficiencia de hierro; mientras que una ferritina sérica baja es prácticamente diagnóstica de deficiencia de hierro, una ferritina sérica normal puede observarse en pacientes con deficiencia de hierro y con enfermedades coexistentes (p. ej., anemia hepatitisor de trastornos crónicos); estos resultados de las pruebas son útiles para distinguir la anemia por deficiencia de hierro de otras anemias microcíticas.
- Electroforesis de hemoglobina y medición de la hemoglobina A2. La electroforesis de hemoglobina y la medición de la hemoglobina A2 y de la hemoglobina fetal son útiles para establecer la beta-talasemia o la hemoglobina C o D como etiología de la anemia microcítica.
- Contenido de hemoglobina reticulocitaria. Mateos Gonzales et al evaluaron la eficacia diagnóstica de los marcadores hematológicos y bioquímicos comúnmente utilizados, así como el contenido de hemoglobina reticulocitaria (CHr) en el diagnóstico de la deficiencia de hierro en niños, con o sin anemia.
- Análisis de heces. El análisis de las heces para detectar la presencia de hemoglobina es útil para establecer la hemorragia gastrointestinal (GI) como etiología de la anemia ferropénica.
- Fragilidad osmótica incubada. La microesferocitosis puede producir un VCM; bajo-normal o ligeramente anormal, sin embargo, el VCM suele estar elevado en lugar de disminuido, y el frotis periférico muestra una falta de palidez central en lugar de hipocromía.
- Concentraciones de plomo en los tejidos. Medir las concentraciones tisulares de plomo; la intoxicación crónica por plomo puede producir una leve microcitosis; la anemia probablemente esté relacionada con la anemia de los trastornos crónicos.
- Aspiración de médula ósea. Un aspirado de médula ósea puede ser diagnóstico de carencia de hierro; la ausencia de hierro teñible en un aspirado de médula ósea que contenga espículas y una muestra de control simultánea que contenga hierro teñible permiten establecer un diagnóstico de carencia de hierro sin necesidad de otras pruebas de laboratorio.
Gestión médicaLa atención médica empieza por establecer el diagnóstico y el motivo de la carencia de hierro.
- Terapia con hierro. Las sales de hierro orales son la medicación más económica y eficaz para el tratamiento de la anemia ferropénica; de las diversas sales de hierro disponibles, el sulfato ferroso es el más utilizado.
- Tratamiento de la hemorragia. El tratamiento quirúrgico consiste en detener la hemorragia y corregir el defecto subyacente para que no reaparezca; esto puede implicar la cirugía para el tratamiento de enfermedades neoplásicas o no neoplásicas del tracto gastrointestinal (GI), el tracto genitourinario (GU), el útero y los pulmones.
- Dieta. En algunas zonas del mundo se ha iniciado la adición de hierro no hemo a las dietas nacionales.
Manejo farmacológicoLos medicamentos para la anemia ferropénica incluyen:
- Productos de hierro. Estos agentes se utilizan para proporcionar el hierro adecuado para la síntesis de hemoglobina y para reponer las reservas corporales de hierro.
- Hierro parenteral. Reservar el hierro parenteral para los pacientes que no pueden absorber el hierro oral o que tienen una anemia creciente a pesar de las dosis adecuadas de hierro oral; es caro y tiene mayor morbilidad que los preparados de hierro oral.
Gestión de enfermeríaLos cuidados de enfermería de un niño con anemia ferropénica incluyen lo siguiente:
Valoración de enfermería
La valoración del niño incluye:
- Historial dietético. La historia dietética es importante; los vegetarianos son más propensos a desarrollar una deficiencia de hierro a menos que su dieta se complemente con hierro; se inician programas nacionales de suplementación de hierro en la dieta en muchas partes del mundo donde la carne es escasa en la dieta y la anemia por deficiencia de hierro es frecuente.
- Antecedentes de hemorragia. La hemorragia es la causa más común de la deficiencia de hierro, ya sea por una infección parasitaria (anquilostoma) o por otras causas de pérdida de sangre; con sangrado de la mayoría de los orificios (hematuria, hematemesis, hemoptisis), los pacientes se presentarán antes de desarrollar una anemia ferropénica crónica; sin embargo, la hemorragia gastrointestinal puede pasar desapercibida.
- Examen físico. La anemia produce una palidez inespecífica de las membranas mucosas;. Se han descrito una serie de anomalías de los tejidos epiteliales en asociación con la anemia ferropénica;, entre las que se encuentran la cintilla esofágica, la coiloniquia, la glositis, la estomatitis angular y la atrofia gástrica.
Diagnóstico de enfermería
Basándose en los datos de la evaluación, los principales diagnósticos de enfermería son:
- Fatiga relacionada con la disminución de la hemoglobina y de la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre.
- Conocimientos deficientes relacionados con la complejidad del tratamiento, la falta de recursos o el desconocimiento de la enfermedad.
- Riesgo de infección
- Riesgo de hemorragia
Planificación y objetivos de los cuidados de enfermería
Los principales objetivos de la planificación de los cuidados de enfermería para los pacientes con anemia ferropénica son
- Los pacientes/cuidadores verbalizarán el uso de los principios de conservación de energía.
Los pacientes/cuidadores verbalizarán la reducción de la fatiga, como lo demuestran los informes sobre el aumento de la energía y la capacidad de realizar las actividades deseadas. - El paciente/cuidador verbalizará la comprensión de su propia enfermedad y el plan de tratamiento.
- El paciente tendrá un riesgo reducido de infección, como demuestra la ausencia de fiebre, un recuento normal de glóbulos blancos y la aplicación de medidas preventivas como el lavado de manos adecuado.
- El paciente tendrá los signos vitales dentro del límite normal.
- El paciente tendrá un riesgo reducido de hemorragia, como demuestran los niveles normales o adecuados de plaquetas y la ausencia de hematomas y petequias.
Intervenciones de enfermería
Las intervenciones de enfermería para un niño con anemia ferropénica son:
Administrar los medicamentos prescritos, según lo ordenado:
- Administrar hierro IM o IV cuando el hierro oral se absorbe mal.
- Realizar pruebas de sensibilidad de la inyección de hierro IM para evitar el riesgo de anafilaxia.
- Aconsejar al paciente que tome los suplementos de hierro una hora antes de las comidas para una máxima absorción; si se producen molestias gástricas, sugerir la toma del suplemento con las comidas – retomar el horario entre comidas si los síntomas disminuyen.
- Informar al paciente de que las sales de hierro hacen que las heces sean de color verde oscuro o negro.
- Aconsejar al paciente que tome formas líquidas de hierro mediante una pajita y que se enjuague la boca con agua.
Reducir el cansancio
- Ayudar al paciente/cuidadores a desarrollar un horario de actividad y descanso diario.
- Insistir en la importancia de los períodos de descanso frecuentes.
- Controlar la hemoglobina, el hematocrito, el recuento de glóbulos rojos y de reticulocitos.
- Educar en técnicas de conservación de la energía.
- Animar al paciente a continuar con la terapia de hierro durante un tiempo total de la terapia (de 6 meses a un año), incluso cuando la fatiga ya no esté presente.
Educar al paciente y a los cuidadores sobre la anemia ferropénica:
- Explicar la importancia de los procedimientos de diagnóstico (como el recuento sanguíneo completo), la aspiración de médula ósea y la posible derivación a un hematólogo.
- Explicar la importancia de la sustitución/suplementación de hierro.
- Educar al paciente y a la familia sobre los alimentos ricos en hierro (vísceras y otras carnes, verduras de hoja verde, melaza, judías).
Prevenir la infección
- Evaluar si hay signos locales o sistémicos de infección, como fiebre, escalofríos, hinchazón, dolor y malestar corporal.
- Controlar el recuento de glóbulos blancos para anticipar la necesidad de una terapia antibiótica, antiviral y antifúngica.
- vInstruir al paciente para que evite el contacto con personas con infecciones existentes.
- Insistir en la importancia de la higiene diaria, el cuidado de la boca y el cuidado perineal.
Evitar las hemorragias
- Monitorizar el recuento de plaquetas; instruir al paciente/cuidadores sobre las precauciones de sangrado.
- Anticipar la necesidad de una transfusión de plaquetas una vez que el recuento de plaquetas descienda a un valor muy bajo.
- Evaluar la piel en busca de hematomas y petequias.
Evaluación
Los objetivos se cumplen, como lo demuestran:
- Los pacientes/cuidadores verbalizarán el uso de los principios de conservación de la energía.
- Los pacientes/cuidadores verbalizarán la reducción de la fatiga, como lo demuestran los informes sobre el aumento de la energía y la capacidad de realizar las actividades deseadas.
- El paciente/cuidador verbalizará la comprensión de su propia enfermedad y el plan de tratamiento.
- El paciente tendrá un riesgo reducido de infección, como demuestra la ausencia de fiebre, un recuento normal de glóbulos blancos y la aplicación de medidas preventivas como el lavado de manos adecuado.
- El paciente tendrá los signos vitales dentro del límite normal.
- El paciente tendrá un riesgo reducido de hemorragia, como demuestran los niveles normales o adecuados de plaquetas y la ausencia de hematomas y petequias.
Directrices de documentación
La documentación para un niño con anemia ferropénica incluye:
- Los resultados de la evaluación inicial y posterior deben incluir signos y síntomas.
- Restricciones culturales o religiosas individuales y preferencias personales.
- Plan de atención y personas implicadas.
- Plan de enseñanza.
- Respuestas del paciente a las enseñanzas, intervenciones y acciones realizadas.
- Consecución o progreso hacia el resultado deseado.
- Necesidades a largo plazo, y quién es responsable de las acciones a realizar.
Plan de cuidados de enfermería
Fatiga
Fatiga: Sensación abrumadora y sostenida de agotamiento y disminución de la capacidad de trabajo físico y mental al nivel habitual.
Puede estar relacionado con
- Disminución de la hemoglobina y de la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre.
Posiblemente, se evidencie en
- Malestar o disnea de esfuerzo.
- Incapacidad de mantener el nivel habitual de actividad física.
- Aumento de las necesidades de descanso.
- Informe de fatiga y falta de energía.
Resultados deseados
- El paciente verbalizará el uso de los principios de conservación de la energía.
- El paciente verbalizará la reducción de la fatiga, como lo demuestran los informes sobre el aumento de la energía y la capacidad de realizar las actividades deseadas.
Intervenciones de enfermería | Justificación |
---|---|
Evaluar la causa específica de la fatiga. | La causa específica de la fatiga se debe a la hipoxia tisular de la anemia normocítica; Otros problemas médicos relacionados también pueden comprometer la tolerancia a la actividad. |
Evaluar la capacidad del paciente para realizar las actividades de la vida diaria (AVD), y las exigencias de la vida diaria, | La fatiga puede limitar la capacidad del paciente para participar en el autocuidado y desempeñar sus responsabilidades en la familia y la sociedad, como trabajar fuera de casa. |
Ayudar al paciente a planificar y priorizar las actividades de la vida diaria (AVD). | Esto permitirá al paciente maximizar su tiempo para realizar actividades importantes. No todas las actividades de autocuidado e higiene deben realizarse por la mañana. Del mismo modo, no es necesario que todas las tareas domésticas se realicen en un solo día. |
Ayudar al paciente a desarrollar un horario de actividad y descanso diario. Insistir en la importancia de los períodos de descanso frecuentes. | Las reservas de energía pueden agotarse a menos que el paciente respete la necesidad del cuerpo de aumentar el descanso. Un plan que equilibre períodos de actividad con períodos de descanso puede ayudar al paciente a completar las actividades deseadas sin añadir niveles de fatiga. |
Controlar la hemoglobina, el hematocrito, el recuento de glóbulos rojos y de reticulocitos. | La disminución de los índices de glóbulos rojos se asocia a la disminución de la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre. Es fundamental comparar los valores de laboratorio seriados para evaluar la progresión o el deterioro en el paciente e identificar los cambios antes de que sean potencialmente mortales. |
Educar en técnicas de conservación de la energía. | Los pacientes y los cuidadores pueden necesitar aprender habilidades para delegar tareas en otros, establecer prioridades y agrupar los cuidados para utilizar la energía disponible para completar las actividades deseadas. La organización y la gestión del tiempo pueden ayudar al paciente a conservar la energía y reducir la fatiga. |
Instruir al paciente sobre los medicamentos que pueden estimular la producción de glóbulos rojos en la médula ósea. | La eritropoyetina humana recombinante, un factor de crecimiento hematológico, aumenta la hemoglobina y disminuye la necesidad de transfusiones de glóbulos rojos. |
Proporcionar terapia de oxígeno suplementario, según sea necesario. | La saturación de oxígeno debe mantenerse al 90% o más. |
Anticipar la necesidad de transfusión de glóbulos rojos empaquetados. | Los glóbulos rojos empaquetados aumentan la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre. |
Remitir al paciente y a su familia a un terapeuta ocupacional. | El terapeuta ocupacional puede enseñar al paciente a utilizar dispositivos de ayuda. El terapeuta también puede ayudar al paciente y a su familia a evaluar la necesidad de adoptar medidas adicionales de conservación de la energía en el hogar. |
Conocimiento deficiente: Ausencia o deficiencia de información cognitiva relacionada con un tema específico.
Puede estar relacionado con
- Complejidad del tratamiento.
- Falta de memoria.
- Falta de recursos.
- Nueva condición o tratamiento.
- Desconocimiento del estado de la enfermedad.
Posiblemente, se evidencie por
- Seguimiento inexacto de las instrucciones.
- Interrogar a los miembros del equipo sanitario.
- Información verbalmente inexacta.
Resultados deseados
- El paciente verbalizará la comprensión de su propia enfermedad y el plan de tratamiento.
Intervenciones de enfermería | Justificación |
---|---|
Evaluar los conocimientos actuales sobre el diagnóstico, el proceso de la enfermedad, los posibles factores causales y el tratamiento. | Determinar los conocimientos y percepciones actuales del paciente facilitará la planificación de la enseñanza individualizada. Los pacientes pueden tener una comprensión general de la anemia relacionada con la deficiencia de hierro, pero un conocimiento limitado de otros tipos de anemia. |
Evaluar la comprensión del paciente y su familia del nuevo vocabulario médico. | Por lo general, las personas tienen una comprensión limitada del vocabulario médico, por lo que no están expuestas al lenguaje que utilizan los profesionales de la salud. |
Explicar la importancia de los procedimientos de diagnóstico (como el recuento sanguíneo completo), la aspiración de médula ósea y la posible derivación a un hematólogo. | El diagnóstico de un tipo de anemia se basará en los cambios en los índices de glóbulos rojos y los hallazgos en el aspirado de médula ósea. |
Explicar el vocabulario hematológico y las funciones de los elementos de la sangre, como los glóbulos blancos, los glóbulos rojos y las plaquetas. | Los pacientes suelen tener un conocimiento básico del sistema hematológico. |
Instruir al paciente para que evite los factores de riesgo conocidos. | Factores causales como el alcoholismo, la exposición a sustancias químicas tóxicas, las deficiencias dietéticas y el uso de algunos medicamentos pueden afectar a la producción de glóbulos rojos y provocar anemia. |
Para la anemia aplástica: | |
|
Los antígenos de histocompatibilidad pueden provocar el rechazo de la médula del donante. |
|
La prueba del antígeno leucocitario humano (HLA), también conocida como tipificación de HLA o tipificación de tejidos, identifica los antígenos de los glóbulos blancos (WBC) que determinan la compatibilidad de los tejidos para el trasplante de órganos |
|
El tratamiento de elección en pacientes sin donantes con compatibilidad HLA es la inmunosupresión con factores estimulantes de colonias de granulocitos-macrófagos, ciclofosfamida, globulina antitimocítica y ciclosporina. |
|
El trasplante de células madre hematopoyéticas (TCH) es una terapia eficaz para muchas enfermedades potencialmente mortales. Por lo general, se utilizan células propias (autólogas) del paciente o células (alogénicas) de un donante con la misma composición genética. |
Explicar las posibles complicaciones asociadas al tratamiento inmunosupresor. | |
|
Los primeros síntomas son una erupción maculopapular roja, sequedad ocular, dolor abdominal e ictericia. |
|
Los pacientes con EICH crónica pueden presentar diversos síntomas. La erupción cutánea y las llagas en la boca son algunos de los signos iniciales más comunes de la enfermedad. El sarpullido suele ser ligeramente elevado y puede provocar picor. |
|
El rechazo se produce cuando se produce una sensibilización a los antígenos de histocompatibilidad adquiridos durante las transfusiones de sangre anteriores y conlleva una alta tasa de mortalidad. Los regímenes de acondicionamiento con ciclofosfamida (Cytoxan) e irradiación linfoide total muestran una disminución del riesgo de fracaso del injerto. |
Para la anemia por deficiencia nutricional: | |
|
Las inyecciones de vitamina B12 se utilizan para tratar los niveles bajos (deficiencia) de esta vitamina. Se administran mensualmente durante el resto de la vida del paciente. Eleva los niveles de vitamina B12 , una deficiencia causada por la falta de factor intrínseco que dificulta la absorción de la vitamina. |
|
Una dieta equilibrada que incluya una variedad de alimentos de cada grupo alimentario suele contener los nutrientes esenciales necesarios para promover la formación de glóbulos rojos. Los pacientes necesitan tener una ingesta adecuada de verduras de hoja verde oscura, productos animales, incluyendo pescado, carne, aves de corral, huevos, leche y cereales de desayuno fortificados. |
|
La dosis y la frecuencia de administración dependerán de la gravedad de la anemia. Los suplementos de hierro se administran por vía oral con las comidas para evitar las molestias gástricas. También hay inyecciones intramusculares que se administran por el método de la vía Z para evitar la fuga de la solución en el tejido subcutáneo a lo largo del recorrido de la aguja. Mientras que el ácido fólico se administra por vía oral con un vaso lleno de agua. |
Para la anemia por pérdida de sangre: | |
|
La eritropoyetina humana recombinante, un factor hematológico, eleva los niveles de hemoglobina y disminuye la necesidad de una transfusión de glóbulos rojos empaquetados. |
|
Una unidad de glóbulos rojos empaquetados aumenta el nivel de hemoglobina en 1 g/dl. |
Riesgo de infección: Con mayor riesgo de ser invadido por organismos patógenos.
Factores de riesgo
- Mal funcionamiento de la médula ósea.
- Sustitución de la médula por grasa en la anemia aplásica.
Posiblemente, se evidencie por
- [no aplicable].
Resultados deseados
- El paciente tendrá un riesgo reducido de infección, como demuestra la ausencia de fiebre, un recuento normal de glóbulos blancos y la aplicación de medidas preventivas como el lavado de manos adecuado.
- El paciente tendrá los signos vitales dentro del límite normal.
Intervenciones de enfermería | Justificación |
---|---|
Evaluar si hay signos locales o sistémicos de infección, como fiebre, escalofríos, hinchazón, dolor y malestar corporal. | Las infecciones oportunistas pueden desarrollarse fácilmente, especialmente en pacientes inmunocomprometidos. |
Controlar el recuento de glóbulos blancos. | Un recuento bajo de glóbulos blancos (leucopenia) es una disminución de las células que combaten la enfermedad (leucocitos) en la sangre. En general, para los adultos, un recuento inferior a 4. 000 leucocitos por microlitro de sangre se considera un recuento bajo de leucocitos. |
Indique al paciente que informe inmediatamente de los signos y síntomas de infección. | Una simple fiebre es lo suficientemente importante como para no prestarle atención. Puede estar indicada la necesidad de una terapia antibiótica. |
Anticipar la necesidad de una terapia antibiótica, antiviral y antifúngica. | Estos agentes son eficaces para acabar con una infección. |
Instruir al paciente para que evite el contacto con personas con infecciones existentes. | Estos pueden ser una fuente de infección para el paciente inmunocomprometido. Los niños, de 12 años o menos, están en riesgo porque pueden ser portadores de infecciones, especialmente de las vías respiratorias superiores. |
Si el paciente está hospitalizado, proporcionar una habitación privada para el aislamiento de protección. | Los cambios ambientales pueden ser importantes si el recuento absoluto de neutrófilos es inferior a 500/mm 3 . Las precauciones de aislamiento protectoras pueden incluir colocar al paciente en una habitación privada, limitar las visitas y hacer que todas las personas que entren en contacto con el paciente utilicen mascarilla, bata y guantes. Estos pacientes corren un riesgo importante de infección. |
Indique al paciente que evite comer frutas y verduras crudas y carne sin cocinar. | Estos alimentos pueden albergar bacterias. Una dieta baja en bacterias protege al paciente de la exposición a patógenos. |
Insistir en la importancia de la higiene diaria, el cuidado de la boca y el cuidado perineal. | Estas medidas preventivas ayudan a evitar la ruptura de la piel y a disminuir el riesgo de infección. |
Enseñar al paciente y a los visitantes a lavarse las manos correctamente. | Practicar la higiene de las manos es una forma eficaz de prevenir las infecciones. Lavarse las manos puede evitar la propagación de gérmenes, incluidos los que son resistentes a los antibióticos. |
Administrar el factor de crecimiento de glóbulos blancos para estimular la producción de neutrófilos. | Los factores estimulantes de colonias (FEC), el pegfilgrastim de acción prolongada y el filgrastim son medicamentos utilizados para estimular la producción de glóbulos blancos que combaten las infecciones. |
Riesgo de hemorragia: Con riesgo de disminución del volumen sanguíneo que puede comprometer la salud.
Factores de riesgo
- Mal funcionamiento de la médula ósea.
- Sustitución de la médula por grasa en la anemia aplásica.
Posiblemente, se evidencie por
- [no aplicable].
Resultados deseados
- El paciente tendrá un riesgo reducido de hemorragia, como demuestran los niveles normales o adecuados de plaquetas y la ausencia de hematomas y petequias.
Intervenciones de enfermería | Justificación |
---|---|
Evaluar la piel en busca de hematomas y petequias. | Los hematomas y las petequias suelen ser evidentes cuando el recuento de plaquetas desciende a 20. 000 mm3. |
Evaluar si hay una hemorragia franca de la nariz, las encías, la vagina o el tracto urinario o gastrointestinal. | La evaluación temprana facilita el tratamiento inmediato. Estos sitios son los más comunes para las hemorragias espontáneas. |
Controlar el recuento de plaquetas. | Un recuento bajo de plaquetas o trombocitopenia está causado por un mal funcionamiento de la médula ósea derivado de deficiencias nutricionales, fármacos, ciertas causas víricas o anemia aplásica. El riesgo de hemorragia aumenta a medida que disminuye el recuento de plaquetas. |
Controlar las heces (guayacol) y la orina (Hemastix) en busca de sangre oculta. | Estas pruebas ayudan a identificar el lugar de la hemorragia. |
Consolidar la prueba de muestreo de sangre del laboratorio. | La toma de muestras de sangre repetida a lo largo del tiempo puede provocar anemia. La consolidación minimiza el número de venipunciones y optimiza el volumen de sangre. |
Instruir al paciente en las modificaciones dietéticas para reducir el estreñimiento. | Seguir una dieta rica en fibra y beber mucho líquido para evitar el estreñimiento o utilizar un ablandador de heces y otros laxantes según lo prescrito si se tiene dificultad para defecar. |
Instruir a la usuaria sobre las precauciones de sangrado.
|
Una vez que el recuento de plaquetas del paciente desciende a 50. 000 mm3 , se debe instituir inmediatamente la precaución hemorrágica para evitar el riesgo de hemorragia espontánea. |
Anticipar la necesidad de una transfusión de plaquetas una vez que el recuento de plaquetas descienda a un valor muy bajo. | Puede ser necesaria la sustitución de plaquetas para reducir el riesgo de hemorragia. La premedicación con antihistamínicos y antipiréticos reduce los efectos secundarios de la reacción a la transfusión. |