Definición
La terapia Gestalt es una forma de psicoterapia, basada en el ideal experiencial del «aquí y ahora», y en las relaciones con los demás y el mundo. Es una forma de psicoterapia existencial o experiencial que hace hincapié en la responsabilidad personal. La terapia Gestalt se utiliza a menudo para aumentar la conciencia de sí mismo del paciente, dejando de lado el pasado y centrándose en el presente.
Historia
La terapia Gestalt fue desarrollada originalmente por Frederick «Fritz» Perls, Laura Perls y Paul Goodman en la década de 1940. Perls creía que la autoconciencia conduce a la autoaceptación y a la responsabilidad de los propios pensamientos y sentimientos. La terapia Gestalt pasó de sus inicios a mediados del siglo XX a una rápida y amplia popularidad durante la década de los 60 y principios de los 70. Durante los años 70 y 80, los centros de formación de la terapia Gestalt se extendieron por todo el mundo, pero en su mayoría no estaban alineados con entornos académicos formales.
Enfoque de la terapia
La terapia se centra en la experiencia del individuo en el momento presente, en la relación terapeuta-paciente, en los contextos ambientales y sociales de la vida de la persona y en los ajustes de autorregulación que las personas realizan como resultado de su situación general.
Metas que se anima a alcanzar el paciente durante la Terapia Gestalt
- Identificar la acción de la persona o tomar conciencia de lo que hace.
- Tomar conciencia de cómo están realizando un determinado comportamiento.
- Aprender a cambiar los comportamientos que le impiden alcanzar sus objetivos vitales.
- Aceptarse y valorarse como persona.
- Hace hincapié en lo que se está haciendo, pensando y sintiendo en el momento presente en lugar de lo que podría haber sido, debería haber sido, fue o podría ser. Se centra en lo que está sucediendo en lugar de en el tema que se está tratando.
Técnicas de la Gestalt
- Aumentar la conciencia del lenguaje corporal y de los mensajes internos negativos.
- Hacer que el paciente hable continuamente en tiempo presente y en primera persona para enfatizar el conocimiento de sí mismo.
- Creación de episodios por parte del terapeuta y desviaciones que demuestran claramente un punto en lugar de explicar con palabras.
- Pedir al paciente que se concentre en una parte de su personalidad o en una emoción. A continuación, el terapeuta pedirá al paciente que se dirija a ella como si estuviera sentada por sí misma en la silla del paciente.
- Para aumentar el autoconocimiento, el terapeuta suele utilizar esta terapia haciendo que se escriban y lean cartas, se lleven diarios y se realicen otras actividades diseñadas para dejar de lado el pasado y centrarse en el presente.