Notas
Descripción
- La mola hidatiforme es una alteración del crecimiento embrionario temprano que provoca la interrupción de la placenta, la rápida proliferación de células anormales y la destrucción del embrión.
- Hay dos tipos distintos de lunares hidatiformes: completos y parciales.
- En una mola completa, los cromosomas son 46XX o 46XY pero son aportados por un solo progenitor y el material cromosómico está duplicado. Este tipo suele dar lugar a un coriocarcinoma.
- Una mola parcial tiene 69 cromosomas. Hay tres cromosomas por cada par en lugar de dos. Este tipo de mola rara vez da lugar a un coriocarcinoma.
Etiología
- La etiología de los lunares hidatiformes es desconocida. Las anomalías genéticas, ovulares o nutricionales podrían ser las responsables de la enfermedad trofoblástica.
Fisiopatología
- Una mola hidatiforme es un tumor de la placenta que se desarrolla después de que se haya producido el embarazo; puede ser benigno o maligno. El riesgo de malignidad es mayor con una mola completa.
- El embrión muere y las células trofoblásticas siguen creciendo, formando un tumor invasivo.
- Se caracteriza por la ploriferación de vellosidades placentarias que se vuelven edematosas y forman racimos en forma de uña. Las vesículas llenas de líquido crecen rápidamente, provocando que el útero sea más grande de lo esperado durante la duración del embarazo.
- Los vasos sanguíneos están ausentes, así como el feto y la bolsa amniótica.
Resultados de la evaluación
1. Manifestación clínica
- Sangrado vaginal (puede contener parte de las vellosidades edematosas)
- Útero más grande de lo esperado para la duración del embarazo.
- Calambres abdominales por distensión uterina.
- Signos y síntomas de preeclampsia antes de las 20 semanas de gestación
- Náuseas y vómitos intensos
2. Resultados de los estudios de laboratorio y de diagnóstico
- Los niveles séricos de hCG son anormalmente altos.
- La ecografía revela las características del crecimiento de los molares.
Gestión de enfermería
1. Garantizar el bienestar físico del paciente mediante una evaluación e intervenciones precisas.
- Revise los antecedentes pertinentes y la historia de este embarazo.
- Preparar la evacuación del útero mediante legrado por succión (no se recomienda la inducción del parto con agentes oxitócicos o prostaglandinas debido al mayor riesgo de hemorragia).
- Administrar líquidos intravenosos según lo prescrito.
2. Proporcionar enseñanza al paciente y a la familia.
- Garantizar un seguimiento y un autocuidado adecuados, explicando que es frecuente la posibilidad de recurrencia del problema o la progresión a coriocarcinoma. Explique también que los niveles de hCG deben controlarse durante 1 año.
- Discutir la necesidad de prevenir el embarazo durante al menos 1 año después del diagnóstico y el tratamiento.
- Informar a la usuaria de que no se recomiendan los anticonceptivos orales porque suprimen la hormona luteinizante hipofisaria, que puede interferir con la medición de hCG en suero.
- Describa y haga hincapié en los signos y síntomas que deben notificarse (por ejemplo, hemorragia vaginal irregular, secreción persistente de las mamas, hemoptisis y dolores de cabeza graves y persistentes). Estos síntomas pueden indicar la propagación de la enfermedad a otros órganos.
3. Abordar las necesidades emocionales y psicosociales.