Después de bañar y secar la espalda, hay que masajearla o frotarla a fondo.
I. Objetivo
- Para estimular la circulación y dar un alivio general.
- Para prevenir las escaras
- Para reconfortar al paciente.
II. Equipo
- Alcohol 25%
- Polvo de talco
- Toalla de baño
III. Procedimiento
- Ayude al paciente a colocarse sobre el abdomen o de lado, con la espalda hacia la enfermera y el cuerpo cerca del borde de la cama para que esté lo más cerca posible del operador. Si se utiliza la posición supina y el paciente es una mujer, una almohada bajo el abdomen elimina la presión de los pechos y favorece la relajación.
- Levantar la camisa y la bata.
- Aplique a la espalda loción para frotar o polvos de talco para reducir la fricción. Al frotar la espalda, utilice movimientos largos y firmes y movimientos de amasamiento. La cantidad de presión a ejercer depende del estado del paciente. Empiece por el cuello y los hombros y luego continúe por toda la espalda.
- Masajear con ambas manos trabajando con un golpe fuerte. En movimientos ascendentes que descendentes. Prestar especial atención a las zonas de presión en el frotamiento (generalmente se utiliza alcohol del 25%) al 50% por su efecto refrescante, pero se puede utilizar loción para frotar).
- Vuelva a empolvar la zona al finalizar el proceso de frotado, que debería durar entre 3 y 5 minutos.
- Poner al paciente de espaldas y ponerle la camisa o la bata.
- Arreglar y hacer que el paciente esté cómodo.
Movimientos utilizados
- Effleurage (acariciar) es un movimiento de barrido largo con la palma de la mano que se ajusta al contorno de la superficie tratada, sobre una superficie pequeña (en el cuello) se utilizan el pulgar y los dedos. Los golpes deben ser lentos, rítmicos y suaves, con una presión constante y en la dirección del flujo venoso.
- Amasamiento: se realiza con la palma de la mano del lado cubital apoyada en la superficie y los dedos, y se agarra la piel y los tejidos subcutáneos que se mueven con la mano del operador.
- Fricción: se realiza con toda la superficie palmar de la mano o con los dedos y los pulgares sobre zonas limitadas. Este movimiento es circular de amasamiento con presión contra la parte subyacente del tejido que no se puede agarrar.