Hoy en día, todos los niños recién nacidos que acuden al hospital o a cualquier centro de salud están obligados a someterse a un cribado neonatal. Es una forma de mejorar la salud infantil en distintos países. El cribado permite la detección temprana de trastornos. De este modo, las instituciones sanitarias, con la ayuda de los padres, pueden conocer y realizar algunas intervenciones médicas si se detectan y son necesarias. Su objetivo principal es dar a todos los recién nacidos la oportunidad de llevar una vida normal y protegerlos para que alcancen todo su potencial.
El cribado neonatal se define como un procedimiento sencillo para averiguar si el bebé tiene un trastorno metabólico congénito que puede provocar retraso mental e incluso la muerte si no se trata.
Entonces, ¿cómo se realiza la prueba de cribado de los recién nacidos?
La primera es que el cribado debe realizarse dentro de las 48 horas o al menos 24 horas desde el nacimiento, pero no más tarde de 3 días después del parto completo. El procedimiento es que un recién nacido ingresado en cuidados intensivos puede quedar exento del requisito de los 3 días, pero debe someterse a la prueba a los 7 días de edad.
A continuación, se extraen unas gotas de sangre al pinchar el talón del bebé. A continuación, se secan en una tarjeta absorbente especial y se dejan secar durante al menos 4 horas. Este procedimiento puede ser realizado por el médico, la enfermera, la matrona o el tecnólogo médico.
Por tanto, si una prueba de detección sugiere un problema, el médico/pediatra del bebé hará un seguimiento con más pruebas. Si esas pruebas confirman un problema, el médico puede remitir al bebé a un especialista para que lo trate. Seguir el plan de tratamiento del médico puede salvar al bebé de problemas de salud y desarrollo de por vida.
Se trata de una prueba muy importante a la que debe someterse todo recién nacido. Algunos bebés, especialmente los que viven en zonas alejadas, donde los centros e instituciones de salud son inaccesibles, por lo que las madres dan a luz en casa, no tienen acceso a esta prueba, lo que les limita el acceso a una atención y unos servicios sanitarios de calidad.
Los dirigentes de todos los países deberían garantizar que todos los niños nacidos puedan ejercer sus derechos a una atención y unos servicios sanitarios adecuados. Un niño tiene todo el derecho a vivir seguro y sano, ¿verdad?